La Educación Sexual no es urgente, ES NECESARIA
Por Sofía Paz Alvarado Delgadillo
El 6 de octubre de 2023, el diario La Tercera titula dentro de sus noticias “Educación Sexual Integral: de prioritaria para Ávia al fondo de la fila con Cataldo”. Este titular evidencia que existen nuevas directrices con el ingreso del Ministro Nicolás Cataldo a la cartera de educación. Entre ellas tiene prioridad el traspaso del sistema municipal al SLEP.
La educación sexual no es urgente para el Ministro Cataldo y, a primera impresión, parece una vuelta de carnero del MINEDUC y un retroceso para los movimientos feministas y docentes que han posicionado su discusión en el debate público. ¿Es favorable que se posponga su tramitación?
Puede que la educación sexual no sea urgente, pero es necesaria. La legislación que tenemos en la materia es de 2010 y depende del ministerio de salud, si hay algo cierto es que en los últimos 13 años, las generaciones y dinámicas escolares cambiaron y lo seguirán haciendo cada vez con mayor velocidad. La ley 20.418 en su artículo primero indica que “Toda persona tiene derecho a recibir educación en materia de regulación de la fertilidad” mandatando a “Los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado deberán incluir dentro del ciclo de Enseñanza Media un programa de educación sexual, el cual, según sus principios y valores, incluya contenidos que propendan a una sexualidad responsable e informe de manera completa sobre los diversos métodos anticonceptivos existentes y autorizados, de acuerdo al proyecto educativo, convicciones y creencias que adopte e imparta cada establecimiento educacional en conjunto con los centros de padres y apoderados”
¿El colegio de tu hijx cumple con esto? ¿Te citaron a alguna reunión para acordar qué se trabajaría en este plan? ¿Está declarado en el proyecto educativo?. Este cuerpo legal pertenece al ministerio de salud, por lo que se desconoce si al interior de los colegios se está cumpliendo su implementación, pues la cartera de salud no fiscaliza a los establecimientos educacionales. Sin embargo, existe en Chile al igual que el plan integral de seguridad escolar o de desarrollo profesional docente, la obligatoriedad de contar con un plan normativo de educación en sexualidad afectividad y género. La gran mayoría de los colegios en el país está lejos de dar cumplimiento a este requerimiento y dista aún más de estar en coherencia con las normativas internacionales. Tanto la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) en el año 2012, como la jurisprudencia establecida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en 2021, han expresado la necesidad apremiante de que el Estado chileno integre información relevante sobre salud sexual y reproductiva en el currículo nacional.
Puede que la educación sexual no sea urgente, pero ocurre todos los días en las escuelas chilenas. Conociendo las temáticas que se declaran en los estándares internacionales, y haciendo un cruce rápido con el currículum nacional, este determina que en la asignatura de orientación en 3ro básico se aborden temáticas en relación al cuerpo, el cuidado y los tipos de familia, en 6° y 7° básico se aborda la reproducción, los manuales de convivencia escolar determinan qué tipo de uniforme se usa y qué tipos de manifestaciones de afecto son permitidas, entre otras… ¿acaso esto no es educación sexual? LA EDUCACIÓN SEXUAL ES RESPONSABILIDAD DE TODxS LxS ADULTxS DE LA ESCUELA. Quien hace orientación hoy está haciendo educación sexual, los inspectores de patio hacen educación sexual, les docentes, psicólogos, equipos PIE hacen educación sexual en sus prácticas cotidianas, muchas veces sin saberlo.
Puede que la educación sexual no sea urgente, pero su inobservancia perpetúa la cultura de la violación. La discusión de este tema no se ha dado solo en Chile, si miramos al otro lado de la cordillera, en Argentina cumple por estos días 17 años de la implementación de la ESI, académicxs y docentes celebran su existencia y reconocen sus aportes: Disminución del embarazo adolescente, prevención de abuso y acoso, respeto a la diversidad, autoconocimiento y autonomía. A partir de las clases/talleres de ESI las niñas y adolescentes pudieron entender que eso que hacía el tío, no era un juego. Que las caricias de su primo no eran adecuadas o que su abuelo tenía conductas que vulneraban sus derechos. La ESI permite identificar y prevenir abusos, es por ello que su implementación debe ser articulada con el servicio de salud y el sistema judicial
La inobservancia de la ESI descuida a nuestra infancia y desprotege a nuestras juventudes. El Estado debe garantizar educación sexual para toda la población, les adultes que atienden en el sistema público, la fuerza policial que toma la denuncia, profesionales y asistentes de salud deben saber de educación sexual. Esta es una deuda pendiente con la ciudadanía chilena.
Que este tema no sea una urgencia para el gobierno nos permite dialogar sobre qué queremos/necesitamos y cómo lo queremos. Es una tremenda oportunidad para llegar a acuerdos. Más allá de insistir con jornadas de educación sexual, el ministro debería aprovechar este tiempo para abrir espacios de diálogos y diagnosticar las necesidades de formación de directivos, docentes, asistentes de la educación profesional, asistente de la educación administrativo, auxiliar y considerar la opinión de madres, padres y apoderados.
¡QUÉ VUELVAN LAS JOCAS, QUE SE ABRAN LAS ESCUELAS! Es necesario que la convocatoria sea amplia y participen todxs aquellxs que se relacionan con lxs estudiantes. Recibir educación sexual es un derecho.
Hay tres elementos que me parecen imprescindibles y deben considerarse en el proyecto de Ley:
- La ESI es SITUADA y debe responder a las necesidades de cada territorio, de cada establecimiento, si bien existen propuestas temáticas genéricas que se deberán abordar, la forma en que se hace, debe responder a la cultura escolar. Es muy necesario preguntar a les estudiantes qué quieren aprender.
- La ESI es para TODXS: docentes, madres, padres, apoderados, asistentes de la educación, estudiantes, adultos mayores, personas con discapacidad, etc. La ESI es transversal a todos los espacios de la escuela, a todas las asignaturas y a todxs quienes se relacionan con ella.
- Las ESI requieren MONITOREO y EVALUACIÓN. Es una responsabilidad ética saber si las acciones contribuyen a mejorar el bienestar de las personas que participan y la manera como se logra, con la finalidad de asegurar su sostenibilidad en el tiempo.
Lo desconocido genera miedo y resistencia, pero eso no significa que no sea necesaria. Necesitamos una Ley de Educación Sexual Integral para el cuidado y la autonomía, un cuerpo legal que considere en su diseño a la ciudadanía chilena, que repare el daño del CIS-TEMA y que habilite nuevas formas de relacionarnos. Puede que la educación sexual no sea urgente, pero es necesaria para vivir una vida placentera y libre de violencia.
Psicologa. Magíster en Psicología Educacional – UTA. Magíster en Estudios Feminstas UBA©
Correspondencia: sofiapazlatam@gmail.com / sofiapaz.alvarado@gmail.com